Cuenta que te cuenta

Hace poco me surgió la propuesta de ir a la Librería Altazor de Majadahonda a contar cuentos. Y, allí que me fui. Oportunidades como esta no se pueden desperdiciar. Poder estar en contacto con niños y niñas de diferentes edades, colegios y procedencia me ayuda a testar cuentos, diversos y diferentes. Por sus gestos puedo deducir cuáles de ellos tienen un mayor grado de aceptación y cuáles debo evitar o modificar un poco la forma en la que los cuento.

No llevo muchos días contando cuentos, aunque si han sido muy intensos. Paco, el librero, y yo decidimos que el mejor número de cuentos para contar eran tres. El primer día seleccionamos “Los Liszt” de Kyo Maclear e ilustrado por Júlia Sardá; una delicia de relato, si tenéis oportunidad de verlo no dejéis de hacerlo, a mi ¡me encanta!. Continuamos con “Gnoma” de Emilia Lang y Eduard Blanch, en donde las ilustraciones están realizadas con marionetas, habla de la amistad, de los conflictos y de la forma de resolverlos para conseguir una buena convivencia -la vida misma. Por último, conté un cuento que me gusta mucho “Orejas de Mariposa” de Luisa Aguilar e ilustrado por André Neves. Tengo que hablaros en profundidad de este último cuento porque me parece un buen ejemplo de como hacer frente a posibles burlas de los demás y mantener una sana autoestima, además tiene un lenguaje rimado que permite leer o contar fácilmente. Me lo apunto para escribir pronto sobre él.

El segundo día buscamos el sentido del humor como hilo conductor para contar diferentes relatos y hacer frente a distintas situaciones. Comenzamos con “El pedo más grande del mundo” de Laure du Faÿ. Venga, lo reconocemos, les provocan risas, muchas risas el tema de los pedos, ¡cómo no! Deciros que se rieron tanto o más los mayores que los pequeños, fue una lectura muy onomatopéyica. Continuamos con “Cómo encender un dragón apagado”, de ese libro ya os he hablado, poner en práctica estrategias para animar a nuestros amigos o seres queridos con resultados no esperados. Pararse, pensar, hablar desde el corazón conseguirá mejores resultados y llamaradas de dragón singulares. Para finalizar les conté “Guapa” de Canizares. Quería alcanzar un éxito casi seguro y un relato en donde aparece una bruja y un ogro casi lo garantiza. La lectura del menú final también tuvo muchas onomatopeyas que procedieron, en su mayor parte, del público convocado.

A la hora de seleccionar los cuentos busco que sean distintos, con relatos variados, ilustraciones diferentes, que se acerquen a los intereses de los niños, puedan generar pensamientos diversos y que sean ¡divertidos! Los niños y niñas son un público exigente, al que no se puede engañar y que manifiestan de forma clara sus opiniones; todo esto convierte la hora del cuento en un momento único que me hace sentir una privilegiada.

Para finalizar contaros que se finaliza coloreando dibujos basados en los cuentos contados, esto me permite avanzar en el desarrollo de mi inteligencia artística, creía no tenerla y después de un tiempo y diversas oportunidades he llegado a la conclusión de que ¡si la poseo! Lo dicho ¡un privilegio!

, , ,

No hay comentarios aún.

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Diseñado por LAL